Tras la imposición por ley de una subida del 5% en el salario mínimo interprofesional, intentaremos comprobar quien es la ganadora con la subida del SMI.
En el siguiente cuadro comparamos el ejercicio 2023 con el 2024:
| AÑO 2023 | AÑO 2024 | ||
| 15.120,00 €/año | 15.876,00 €/año | ||
| 14.105,42 €/año | 14.526,54 €/año | ||
| 39,31 €/año | 325,46 €/año | ||
| 975,24 € | 1.024,00 € | ||
| 4.369,88 € | De 5.077,14 € a 5.974,14 € | ||
| (28,90%) | (Del 31,98% al 37,63 %) | ||
Traduciendo. Aunque sobre el papel, el trabajador ve aumentado su SMI en 54,00 € en 14 pagas (12 ordinarias y 2 pagas extras), esta subida del SMI supone a su vez que la retención fiscal por IRPF pase de 39,31 € a 325,46 € anuales, (es decir 286,15 € más que el año anterior), y su aportación a la Seguridad Social aumente de 975,24 € a 1.024,00 € (78,76 € más). Hagan números y comprobarán como, en la práctica, la subida del SMI supone 30,08 € más (siempre en 14 pagas), y no los 54,00 € que se anuncian.
(Aunque Hacienda ha anunciado que incrementará el mínimo exento en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas -IRPF- en 2024, con el objetivo de actualizarlo a la nueva subida del Salario Mínimo Interprofesional).
¿Quién gana por tanto con esta subida del SMI? Pues creo que todos nos lo vamos “oliendo”. En primer lugar, refiriéndonos sólo a los trabajadores, multipliquemos esos incrementos de retenciones y cotizaciones por los 2,5 millones de trabajadores afectados y obtenemos:
(286,15 + 78,76) x 2,5 m = 912.275.000,00 €
(casi mil millones más de recaudación para el estado)
Alguno pensará, “bueno, 1.000 millones para el Estado no es tanto”. Es más, si incrementan el mínimo exento como hemos indicado, sólo aumentaría la carga tributaria respecto a las cotizaciones a la Seguridad Social que supondrían “sólo” unos 122 millones de euros de los trabajadores.
Pero veamos ahora cuánto supone para las empresas esa subida del SMI no pactada con los empresarios e impuesta por Decreto (lo que viene siendo habitual).
Pues ahí ya vemos cómo el coste anual de un trabajador para la empresa aumenta con respecto al año anterior desde un mínimo de 1.463,00 €/anuales a 2.360,26 €/anuales (dependiendo de la rama de actividad).
El mismo de antes pensará “bueno, los empresarios ganan mucho” (aunque curiosamente, los que lo dicen, NUNCA han sido empresarios).
Pero resulta que el casi el 99,25% de las empresas españolas son micropymes, es decir, tienen plantillas inferiores a diez empleados. Es más, el 94% de ellas cuentan, de media, con 1,7 trabajadores en nómina. (Fuente CEPYME).
Con los números indicados, para una empresa con un trabajador, el coste del mismo aumentará los citados 1.463,00 €/anuales a 2.360,26 €/anuales
Y para una pequeña empresa con 5 trabajadores el coste supondría entre 7.300,00 € a 11.801,30 € anuales.
Eso sí, el Estado recaudará en cotizaciones sociales de las empresas entre 3.657.500.000,00 € y 5.900.650,00 € más que el año anterior.
En otras palabras, entre lo que cobrará de más al trabajador y (sobre todo) a las empresas, el Estado ingresará en 2024, de 4.000 a 7.000 millones de euros más. Y eso, que sólo hasta noviembre de 2023, Hacienda ya recaudó hasta noviembre 112.000 millones de euros más por IRPF, en lo que supone un máximo histórico, tras negarse a adaptar el impuesto a la inflación (eso que ahora dice que hará en 2024). Con esos 112.000 millones al mes de noviembre, Hacienda superará a final de 2023 los 122.835 millones de euros recaudados por IRPF en 2022 y que ya supusieron un récord de recaudación, según los datos publicados por la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE)
Ya sabemos quién gana con la subida del SMI.