14/01/2019
Al menos para mí, tan vergonzoso era subir las pensiones solo el 0,25% y no en función al IPC, como utilizar políticamente a los pensionistas.
No confundamos, aunque decir esto a quienes utilizan ahora a los pensionistas cuando en 2010 bien congelaron las pensiones bien lo consintieron, o bien aquellos que pedían hace poco que «los viejos no votaran porque votan a la derecha» y ahora salen de la mano con «los viejos» a la calle, es una quimera. Pero los datos, las cifras, son las que son.
A ver, se viene diciendo que la pensión se cobra por lo que se ha cotizado y pagado de impuestos. FALSO. El impuesto sobre la renta no se dedica al pago de pensiones. Este impuesto se recauda para atender inversiones en infraestructuras, hospitales, nóminas de funcionarios, cuerpos de seguridad, etc…. y sí, desgraciadamente también para pagar los sueldazos que se ponen nuestros políticos (y esos no se lo suben el IPC). Y TODOS los políticos, no me vengan con milongas, porque donar la mitad de tu sueldo al partido, supone el mismo gasto para todos y el que gana es tu partido.
Pero es más, por un lado, a muchos, durante su vida laboral, al hacer la declaración de la renta, les han devuelto ese dinero que les retuvieron por IRPF, por otro, con el actual sistema de reparto utilizado por la Seguridad Social en España, lo cotizado no sirve para pagar TU futura pensión, sino que pagas a los jubilados actuales.
Dicho esto, veamos cuánto cotiza un trabajador para su jubilación. Pongamos, para simplificar, por ejemplo, un trabajador que ha cobrado durante 45 años el equivalente a 1.800,00 euros al mes (salario medio en España en 2017) y pongamos que esa sea su base reguladora. Pues bien, el trabajador cotiza a la Seguridad Social para su pensión el 4,70%, Es decir, 84,60 euros al mes.
Sigamos con las cifras y si hubiera cotizado esos 45 años por el mismo importe (aunque, evidentemente, hace 45 años no cobraba 1.800,00 euros), serian:
45 años x 12 meses x 84,60 €/mes = 45.684,00 €.
Pongamos que ese trabajador se jubila a los 67 años y le queda una pensión de 1.000,00 €, aunque sería más por su sueldo, pero estamos de ejemplo y según datos de la Seguridad Social, la pensión de jubilación media en España a fecha de diciembre de 2018 fue de 1.107,49 €, lo que quiere decir que con sus 45.684 euros pagados tendría para:
45.684,00 € ÷ 1.000,00 € = 45,68 meses, o lo que es igual 3 años y 9 meses
es decir, nuestro jubilado, con lo que él ha cotizado, tendría pensión hasta los 70 años y 9 meses (e insisto, no es así con el sistema de reparto).
La pregunta lógica (para quien emplee la lógica) es ¿cómo pagamos las pensiones hasta los 83 años y 10 meses, que es la esperanza media de vida en España? ¿Cómo pagamos esos 12 años y 2 meses que el trabajador NO ha pagado?
Se imaginan la respuesta ¿no? Pues sí, sale de lo que las «malvadas» empresas y empresarios cotizan por los trabajadores a la Seguridad Social. Si el trabajador cotiza ese 4,70%, su empleador (sea pequeña, mediana o gran empresa o un autónomo) cotiza cada mes un 23,60%.
Las mismas operaciones que antes:
1.800,00 € x 23,60% = 424,80 €/mes.
424,80 € x 12 meses x 45 años = 229.392,00 € (casi un cuarto de millón de euros)
Y cobrando los 1.000,00 €/mes hablamos de:
229.392,00 € ÷ 1.000,00 € = 229,39 meses, o lo que es igual, casi 20 años de paga.
Ahí están los años que faltaban (y alguno más) para poder seguir cobrando las jubilaciones.
Así que cuando se ataca a empresas, empresarios y autónomos por el mero hecho de serlos, piensen un poco como se pagan las pensiones si no hay empresas.
Y si queremos nos comparamos, pero «Los asalariados españoles son los que menos aportan de entre las principales economías europeas. En concreto, su tipo de cotización por contingencias comunes –conocida como cuota obrera– es del 4,7%. Solo los daneses (2,8%) y los irlandeses (3,6%) aportan menos. Si bien ni las economías ni la financiación de las pensiones en dichos países son comparables con España. Sí lo son Alemania, Francia o Italia, donde la aportación de sus trabajadores es del 17,1%, 10,2% y 7,2%, respectivamente.
Por el contrario, los empresarios españoles se encuentran en la parte más alta del ranking de aportaciones a la Seguridad Social en Europa. Con un tipo de cotización del 23,6% por contingencias comunes (sin contar el resto de aportaciones al desempleo, formación etc.), los empresarios españoles son los que más aportan después de los suecos (23,9%), italianos (24,3%) y franceses (27,7%).» (Fuente: Cinco Días)
¿Hay soluciones? Hoy día, en políticas económicas, todo está inventado (lo que funciona y lo que no), y si en otros países no tienen el problema de las pensiones será por algo. Pero, para no alargarme demasiado, eso lo dejo para otro post.